La Dra. Rose Abramoff y otra activistas encerradas en el taladro del proyecto MVP. Foto: Scientist Rebellion

«Soy una científica de la Tierra. Estudio cómo el cambio climático y el uso humano de la tierra afectan a los ecosistemas como el que está atravesando el oleoducto Mountain Valley. No puedo quedarme quieta y vivir mi vida como de costumbre mientras esta bomba de carbono explota su camino a través de los Apalaches. Es por eso que elijo estar aquí y detener este trabajo con mi cuerpo. Estamos desesperados, se nos acaba el tiempo, así que nos estamos levantando», ha afirmado la Dra. Rose Abramoff, científica terrestre y activista de Scientist Rebellion, que viajó hasta bosques vulnerables y permafrost derritiéndose para medir los gases de efecto invernadero del suelo. Su prestigio también es debido a las simulaciones por computadora «en las que las temperaturas y las emisiones aumentan sin parar, con resultados a la vez aterradores y devastadores». 

Esta acción llega después de una larga historia de manifestaciones en las que se ha involucrado Abramoff. Su mensaje resuena como resistencia contra los continuos proyectos de combustibles fósiles. A ella se unen cuatro activistas que forman parte de «Rocking Chair Rebellion», un contingente de manifestantes mayores en mecedoras que bloquean una vía de acceso.

Marty Zinn es otra de las personas que han acompañado en su acción a Abramoff. Se ha encerrado en el taladro que utilizará Mountain Valley (MVP)para perforar bajo el río.

«He vivido una vida larga a mis casi 80 años; quiero ayudar a garantizar que los jóvenes de hoy y del futuro tengan la oportunidad de vivir una vida también, y una que valga la pena vivir. Estoy actuando en nombre de ellos. Por eso vine a detener el oleoducto Mountain Valley. Su único propósito es transportar gas natural mediante fractura hidráulica, principalmente para exportarlo a países extranjeros y generar mucho dinero para las corporaciones de combustibles fósiles y sus propietarios. Mientras tanto, ponemos en peligro aún más la supervivencia de todo lo que conocemos».

Activistas que forman parte de «Rocking Chair Rebellion» con sus mecedoras. Foto: Scientist Rebellion

La urgencia es subrayada por el científico climático y activista de Scientist RebellionPeter Kalmus, quien ha estado presente apoyando el bloqueo del MVP.

«Estamos en una emergencia causada por los combustibles fósiles. Toda la devastación que hemos visto este verano es sólo el comienzo; actualmente todavía estamos en el camino de perderlo todo, y se debe a que personas ignorantes en el poder quieren hasta el último pedazo de ganancias de combustibles fósiles incluso cuando la Tierra viva se calienta, arde y muere a nuestro alrededor. La lucha para bloquear el MVP será vista como un momento crucial en la historia», ha señalado Kalmus. 

En las pancartas que portaban los manifestantes podía leerse: «Nuestra Tierra está ardiendo» «Proteja nuestro hogar».

Largo historial de violaciones ambientales y batallas judiciales

El oleoducto Mountain Valley es un gasoducto fracturado de 42 pulgadas de diámetro que cubrirá 303 millas de los Apalaches, en Virginia. El proyecto tiene un largo historial de violaciones ambientales y batallas judiciales por no conservar permisos clave, y al tiempo es un proyecto emblemático en la transición para abandonar los combustibles fósiles. En junio de 2023, el presidente Biden y el Congreso aceleraron el oleoducto, a pesar de que los residentes locales expresaron su oposición y sus preocupaciones. 

«Si quemamos los 90 millones de toneladas de CO2 equivalente por año de las que sería responsable el MVP, nos hundiremos aún más en un calor insuperable, incendios mortales, sequías prolongadas y graves inundaciones, poniendo en peligro nuestros alimentos, agua y forma de vida», dice Abramoff. Continúa explicando por qué ella y otros continúan actuando: «Los científicos han estado advirtiendo a los responsables políticos que la habitabilidad de nuestro planeta está amenazada durante más de 40 años, pero no escuchan. Durante décadas, las empresas de combustibles fósiles han estado difundiendo información errónea y sobornando efectivamente a los políticos para que bloqueen cualquier acción significativa».

También considera que «si permitimos que se completen proyectos como MVP y Willow, la extracción de combustibles fósiles sólo continuará expandiéndose en un genocidio planetario constante. No lo permitiremos. Impedir la construcción del oleoducto es fundamental en la lucha contra el cambio climático». 

Desde que se reanudó la construcción el pasado 5 de julio, se han producido más de dos docenas de paros laborales, como cierres y manifestaciones. 

Despedida por ser activista

Una protesta reciente le costó a Abramoff su trabajo como científica asociada en el Laboratorio Nacional de Oak Ridge. Ella y su colega activista Peter Kalmus asistieron a la reunión de la Unión Geofísica Estadounidense en diciembre. Justo antes de que tomaran la palabra los oradores, Abramoff y Kalmus desplegaron en el escenario un cartel que decía: «Fuera del laboratorio y a las calles». Finalmente fueron expulsados de conferencia y se retiró la investigación que Abramoff debía presentar esa semana. En respuesta, escribió un artículo de opinión para el New York Times.

El Laboratorio Nacional Oak Ridge dijo que Abramoff «hizo un mal uso de los recursos gubernamentales al participar en una actividad personal en un viaje de trabajo” y afirmó que «saltar al escenario con el cartel iba en contra del código de conducta del laboratorio», escribió Abramoff en el artículo de opinión. Sabía que corría el riesgo de ser expulsada de la conferencia, pero no esperaba que cancelaran su investigación o perdieran su trabajo

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.