El secretario general de la Asociación de Comunidades de Regantes de Andalucía (Feragua), Pedro Parias, ha destacado que el regadío andaluz vive «una situación realmente complicada». Desde el pasado abril existen restricciones de regadío para los cultivos en Andalucía de «un 25% en Huelva e incluso de un 88% en el Guadalquivir», ha recordado.
Asimismo, en declaraciones a Europa Press, ha afirmado que «existen zonas como la Axarquía (Málaga), donde los niveles de agua son muy bajos y los cultivos tienen que sobrevivir con aguas subterráneas y regeneradas». Un aspecto clave para hallar soluciones alternativas al panorama agrario andaluz, pues los cultivos que no cuenten con dicha opción, están avocados a «casi no producir o a cosechas muy bajas».
Algunas producciones, como la del girasol, se han reducido hasta un 80%. El algodón «también seguirá por esta línea» ha lamentado Parias, y otros productos como el maíz o el tomate ni siquiera «se han podido sembrar».
En cuanto a los cortes de agua, el secretario general ha afirmado que «ya hay zonas en las cuales la administración no está dando agua, o bien porque no se ha aprobado la dotación o por que la que ya se había aportado ya está consumida. Estas medidas se están implementando en zonas como las Marismas del Guadalquivir, Los Palacios (Sevilla) o el Mediterráneo». Según Parias, una política que «se extenderá por más zonas de la comunidad durante este mes de agosto y septiembre».
También ha indicado que la Administración ya ha llevado a cabo algunas iniciativas para mitigar el efecto de la sequía en el sector como «la condonación del IBI» al mismo tiempo que han estimado oportunas otras medidas como «facilitar la capacidad de endeudamiento a las explotaciones de regadío para que puedan subsistir». Después de casi cinco años de sequía la situación de muchas es muy crítica».