En medio de informes sobre continuos ataques aéreos israelíes durante en el sur y el centro de la Franja, y más disparos de cohetes contra Israel desde el territorio palestino, la Oficina para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) advierte de que no ha podido entregar la ayuda humanitaria durante los últimos tres días más allá de las zonas centrales.
En su última alerta sobre el deterioro de la situación de 1,9 millones de desplazados en la Franja, ha señalado que durante los últimos tres días no ha podido entregar la ayuda que necesitan urgentemente los civiles más allá de las zonas centrales, ni en el norte.
La oficina señala «retrasos y denegaciones», junto con el conflicto activo, como las causas de la falta de distribución más allá de Wadi Gaza.
«Esto incluye medicamentos que habrían proporcionado un apoyo vital a más de 100.000 personas durante 30 días, así como ocho camiones de alimentos para personas que actualmente se enfrentan a una inseguridad alimentaria catastrófica y potencialmente mortal».
Wadi Gaza ha estado «separada» del sur durante más de un mes, explica la OCHA, antes de reiterar los llamamientos para un acceso seguro, sostenido y sin obstáculos a las zonas del norte de la Franja.
«La situación de la seguridad, el acceso, el transporte y la desescalada siguen siendo extremadamente difíciles, especialmente para los hospitales de las gobernaciones del norte», detalla el informe, y agrega que siguen existiendo muchos de los mismos obstáculos físicos y administrativos que han dificultado anteriores convoyes de ayuda.
Hospital atacado varias veces
Mientras tanto, en el sur de Gaza, el hospital Al-Amal y las zonas circundantes, que fueron bombardeados el martes dejando cinco muertos, ha vuelto a ser alcanzados «varias veces».
La OCHA indica que aún no se ha confirmado el número de víctimas de las nuevas explosiones en las instalaciones de la Sociedad de la Media Luna Roja Palestina y sus alrededores.
Mientras tanto, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha confirmado que 13 camiones «con suministros médicos cruciales para cirugías y anestesia» han llegado a Gaza este lunes, a través de Rafah, el paso fronterizo con Egipto.
La ayuda debía entregarse al Complejo Médico Nasser y a otros tres hospitales del sur de Gaza (Al Aqsa, Al Awda y el Hospital Europeo de Gaza), y sería suficiente para unos 142.000 pacientes.
Tras destacar la desesperada situación médica en toda Gaza, la OMS ha informado de que sólo 13 de los 36 hospitales siguen funcionando parcialmente; nueve en el sur y cuatro en el norte.
Según OCHA, un total de 105 camiones cargados de alimentos, medicinas y otros suministros entraron el miércoles en la Franja de Gaza a través de los pasos fronterizos de Rafah y Kerem Shalom.
Los mercados carecen de productos básicos
Las familias desarraigadas siguen necesitando suministros básicos, según la actualización, que informa de «la falta de artículos esenciales -como ropa para niños, pañales y compresas- en los mercados locales».
En toda Gaza, casi 1,4 millones de personas se refugian en 155 instalaciones gestionadas por la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA), mientras que la gobernación de Rafah, en el extremo sur, sigue siendo el principal refugio para los desplazados, con cerca de un millón de personas hacinadas.
Refuerzo de las vacunas
En un intento por frenar la galopante transmisión de enfermedades causada por los daños en las infraestructuras de agua y saneamiento, la UNRWA ha anunciado que colaborará con el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), la OMS y otros socios para suministrar más de 960.000 dosis de vacunas en la Franja.
Los receptores recibirán protección contra enfermedades como el sarampión, la neumonía y la poliomielitis, complementando una campaña de inmunización realizada anteriormente por los socios humanitarios a finales de diciembre, que supuso la entrega de más de 600.000 dosis de vacunas a Gaza.
El riesgo de hambruna aumenta cada día
Para ayudar a combatir el riesgo de hambruna que «aumenta cada día» entre los 2,2 millones de habitantes de Gaza, el Programa Mundial de Alimentos (PMA) ha afirmado que sigue siendo imperativo detener el deterioro de la salud y la nutrición, y combatir el hambre restableciendo los servicios públicos básicos.