Un informe reciente de la Comisión Europea muestra que en 2022, un número récord de incendios forestales provocó la quema de 900.000 hectáreas de tierra, lo que corresponde aproximadamente al tamaño de Córcega, la segunda cifra más alta jamás registrada. Debido al impacto del aumento de las temperaturas en determinadas especies, se prevé que el valor de las tierras forestales disminuirá un 27% para finales de siglo. Estas consecuencias, según la Comisión pueden revertirse mediante la Ley de Restauración de la Naturaleza y el suministro de datos de calidad sobre los bosques de la Unión Europea. Por esta razón, ha propuesto una nueva ley de seguimiento forestal que tiene como objetivo crear una base integral de conocimientos forestales , abordar las lagunas de información y permitir una mejor respuesta a las crecientes presiones sobre los bosques.
Tecnología de observación de la Tierra al servicio de los bosques
Los peligros naturales y la actividad humana insostenible han afectado gravemente a los bosques europeos, que son cruciales para luchar contra el cambio climático, proteger la biodiversidad y apoyar las zonas rurales y la economía.
El nuevo sistema de seguimiento permitiría recopilar e intercambiar datos forestales comparables obtenidos mediante tecnología de observación de la Tierra y mediciones terrestres. Por ejemplo, «ayudar a que los bosques sean más resistentes a los peligros ambientales cada vez mayores, a fortalecer la capacidad de los bosques para proporcionar aire más limpio, a facilitar la planificación forestal y a garantizar la cooperación entre los Estados miembros para establecer planes forestales a largo plazo».