La Comunidad de Madrid pretende talar 676 árboles y destruir 48.170 metros cuadrados de zonas verdes con la Línea 11 de Metro

Ecologistas en Acción considera que las mejoras respecto al proyecto de obras son insuficientes. Exigen que el modificado incluya la relocalización de la estación de Madrid Río fuera del Parque de Arganzuela y que las instalaciones de la tuneladora no afecten al Parque de Comillas

Organizaciones ecologistas y afectados se manifiestan en Madrid contra el proyecto
Organizaciones ecologistas y afectados se manifiestan en Madrid contra el proyecto

El pasado 28 de julio Ecologistas en Acción Madrid recibió la notificación del inicio del procedimiento de Evaluación Ambiental Simplificada del proyecto denominado «Modificación del Proyecto constructivo de la ampliación de la Línea 11 de Metro de Madrid, Tramo: Plaza Elíptica-Conde de Casal», otorgando un plazo de 20 días para presentar alegaciones. Dicho documento pretende dar respuesta «a las deficiencias e irregularidades del proyecto constructivo original, tras la polémica causada por el desorbitado número de árboles que iban a ser sacrificados durante las obras y que han movilizado a la ciudadanía durante los últimos meses», explica la organización, que ha analizado el nuevo documento, concluyendo que «se trata de una propuesta insuficiente, a pesar de la reducción del número de árboles a talar«.

Ecologistas en Acción Madrid ha presentado numerosas alegaciones al Proyecto Modificado, y señala que «la Comunidad de Madrid debe ajustar el proyecto a lo contemplado en la Declaración de Impacto Ambiental vigente o, al menos, incorporar al Proyecto Modificado aquellos aspectos del proyecto original que son clave para la conservación del arbolado urbano afectado por las obras». Al tiempo, exigen que las instalaciones y el acceso de la tuneladora deben quedar «fuera del Parque de Comillas, la estación de Madrid-Río debe volver a su ubicación original en el Paseo de Yeserías y la ocupación de zonas verdes debe reducirse al mínimo en la totalidad del trazado, salvando los Jardines de Palestina y otros jardines de su demolición».

Los ecologistas recuerdan que el único proyecto evaluado ambientalmente e informado públicamente es el recogido en el Estudio de Impacto Ambiental del 2020, sobre el que se emitió Declaración de Impacto Ambiental favorable. En dicho proyecto se preveía la tala de 79 árboles y la ocupación de 20.080 m2 de zonas verdes. «En el Modificado ahora presentado se prevé la tala de 676 árboles y la destrucción de 48.170 m2 de zonas verdes. Si bien es cierto que se han reducido las afecciones respecto al Proyecto Constructivo, es evidente que el proyecto se aleja en grado suficiente de lo contemplado en el proyecto original como para exigir el inicio de un nuevo procedimiento de Evaluación Ambiental Ordinario, y no Simplificado, como pretende la Dirección General de Infraestructuras del Transporte Colectivo».

También han criticado «la estrategia seguida por la Comunidad de Madrid, optando por un procedimiento simplificado, en pleno periodo vacacional y sin ningún contacto previo con las organizaciones y colectivos afectados por las obra, parece indicar que nos encontramos ante un intento de justificar la legalidad del proyecto por la vía rápida y de forma cuestionable».
Ecologistas en Acción Madrid considera «muy grave» la actitud del gobierno autonómico, y destaca que sobre el proyecto constructivo «existe un recurso contencioso-administrativo impulsado por la organización ecologista, que sigue en marcha».

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