El ministro de Consumo en funciones, Alberto Garzón, ha destacado la protección que el Gobierno español está realizando «de las personas consumidoras vulnerables frente a los nuevos desafíos digitales y ecosociales que afrontan Europa y Latinoamérica».
Así se ha pronunciado Garzón en el encuentro que se ha celebrado en Madrid entre representantes del Foro Iberoamericano de Agencias Gubernamentales de Protección al Consumidor (FIAGC) y autoridades de la Comisión Europea, en el marco de las actividades de la Presidencia española del Consejo de la UE.
Este encuentro ha reunido a diferentes autoridades y organizaciones de la sociedad civil de ambas regiones, abordando temáticas de interés común, prestando especial atención a la protección de las personas consumidoras vulnerables, los nuevos tipos de comunicaciones comerciales online o los retos y oportunidades derivadas del comercio electrónico.
Junto al comisario europeo de Justicia y Consumo, Didier Reynders, y el representante del FIAGC, Alejandro Pérez, Garzón ha hecho hincapié en la «necesidad de reforzar las relaciones entre países y la cooperación internacional para abordar conjuntamente los nuevos retos, desafíos y obstáculos que el modelo de producción y consumo actual ponen encima de la mesa». Entre ellos, el ministro de Consumo en funciones ha destacado dos: la digitalización y la crisis ecosocial.
Según Garzón, el trabajo realizado por el Gobierno de España para reconocer la figura de la persona consumidora vulnerable y «atender a quien está más desamparada ante el mercado» ha sido «una prioridad para abordar una realidad social desigual que va más allá de lo económico y que tiene que ver también con la edad o la accesibilidad».
«Las nuevas tecnologías son más dinámicas y rápidas que la regulación que podemos hacer los países, lo que nos obliga a estar muy atentos para intentar frenar toda pulsión que pueda existir para cometer posibles fraudes por parte de las empresas frente a los consumidores», ha explicado.
La amenaza del modelo de producción al hábitat
El ministro de Consumo en funciones también ha alertado del desafío que tienen Europa y Latinoamérica ante una «cuestión de amplio alcance» como es la protección, defensa y cuidado del medio ambiente. «Compartimos hábitat y está amenazado por un modelo de producción y consumo muy determinado, donde las cuestiones de la oferta y la demanda tienen mucho que decir», ha enfatizado.
En este sentido, Garzón ha señalado que, aunque «la crisis ecosocial se ha abordado tradicionalmente desde el lado de la oferta y del productor, también se puede hacer un gran recorrido desde la parte de la demanda y del consumo». Por ello, ha animado a visibilizar «las implicaciones sociales, económicas y ecológicas del consumo con el objetivo de que seamos conscientes de dicha huella y sepamos que, como personas consumidoras, también tenemos capacidad de cambiar el sistema».
