Este 13 de septiembre se celebra el Día Internacional del Testamento Solidario, una fecha que honra a las miles de personas que voluntariamente han decidido colaborar con diferentes ONG, como WWF España.
En un momento como el actual en el que las olas de calor, los incendios, la sequía y las inundaciones son noticia diaria en nuestro país, esta forma de seguir apoyando el trabajo de las organizaciones y el bienestar de las generaciones futuras es más importante que nunca.
Este es el caso de Carolyne, testadora a favor de WWF España, quien explica que «quería que mi legado fuera una continuación de mi compromiso con la naturaleza. Me consuela saber que incluso después de mi muerte podré seguir marcando una diferencia, aportando en algo que es importante para mí. Quiero que las generaciones futuras tengan respeto por la Tierra y que la naturaleza siga viva. Saber que he hecho un regalo, un legado, me hace apreciarlo más. Ha sido una decisión fácil».
Los testamentos solidarios no son una novedad, pues algo parecido existía ya, por ejemplo, en el fuero foral de Vizcaya de 1526 con el nombre de legado en favor del alma o en las mandas pías de Navarra, donativos con fines benéficos. La secularización de la sociedad española ha hecho que esta solidaridad se dirija ahora también hacia organizaciones no gubernamentales y fundaciones, aunque la esencia sigue siendo la misma.
Según Juan Carlos Martínez Ortega, abogado y expresidente de la Unión Internacional Profesional de Auxiliares del Notariado, «aquellos que colaboramos en vida con fundaciones u organizaciones benéficas, deberíamos estipular en nuestros testamentos la continuidad o modificación de esa ayuda. ¿Qué sucede con los beneficiarios de esa ayuda si fallecemos? ¿Dejan de recibir apoyo? El testamento notarial es el vehículo idóneo para regular todos estos pormenores y dejar, aunque sea pequeñas cantidades, a entidades solidarias con los más necesitados”.
Las ONG destinan los testamentos solidarios que reciben a hacer realidad sus proyectos y materializar las últimas voluntades de los testadores. Algunos ejemplos: ofrecer compañía durante un año a diez personas mayores que sufren soledad se logra con 1200 €; restaurar una hectárea de un bosque con 6000 €; para ayudar a poner en marcha una clínica móvil basta con una donación de 3000 €; se puede proporcionar tratamiento para curar la desnutrición severa de 150 niños con 6000 € o dar techo a ocho familias refugiadas con 3000€.
Crecen las donaciones
Los datos facilitados por la plataforma HazTestamentoSolidario.org revelan que, en 2021, los españoles donaron 33,8 millones de euros a ONG y fundaciones a través de testamentos solidarios, un 31 % más que la cantidad total ingresada en 2020 (23,3 millones de euros).
Por comunidades autónomas, Madrid destaca por encima del resto con 9 millones de euros donados por los madrileños a través de testamentos solidarios. Le siguen País Vasco con casi cuatro, Cataluña con 3,2 millones, y Castilla León y Valencia con 2,8 y 2,7 millones respectivamente. Andalucía se sitúa justo por detrás, con 2,1 millones.
En cuanto al valor medio de los testamentos solidarios, Madrid y País Vasco están a la cabeza con una media de 117.000 y 112.000 euros respectivamente.
Los bienes más comunes donados en testamentos solidarios son valores, inmuebles, joyas y obras de arte, aunque predominan los importes en metálico, cuya cantidad media ingresada a través de esta vía de colaboración crece también ligeramente de 76.053 en 2020, a 79.904 euros en 2021.
El mundo se mueve
También ha subido el número de testamentos solidarios a nivel mundial. Según los últimos datos disponibles, en 2019 esta forma de colaboración creció un 24,7 % frente al 2018, de acuerdo a un estudio realizado por 18 organizaciones internacionales.
Estados Unidos, Alemania, Reino Unido, Japón, Suiza, Suecia, Canadá e Italia son los países donde más se ha notado este crecimiento, siendo Estados Unidos, Reino Unido, Alemania y Japón los países con los importes más altos recibidos a través de testamentos solidarios: Estados Unidos 230,2 millones de euros, Reino Unido 209,4 millones, Alemania 192,9 millones y Japón 103,3 millones.