El mercurio es una sustancia muy tóxica que representa una grave amenaza mundial para la salud humana y el medio ambiente. Se utiliza en procesos industriales y en diversos productos, como las lámparas y la amalgama dental. La exposición a niveles elevados de mercurio puede causar daños al sistema nervioso central, a los pulmones, a los riñones y al sistema inmunitario.
El Reglamento sobre el mercurio de la Unión Europea protege la salud humana y el medio ambiente de las emisiones antropogénicas y de las liberaciones de mercurio. De este modo, aborda todo el ciclo de vida del mercurio, desde la extracción primaria de mercurio hasta la eliminación final de los residuos de mercurio. El Reglamento vigente ya prohibía el uso de amalgama dental para niños y mujeres embarazadas a partir del 1 de julio de 2018.
Además, el Convenio de Minamata sobre el Mercurio es el principal marco jurídico internacional destinado a proteger la salud humana y el medio ambiente de las emisiones antropogénicas y las liberaciones de mercurio a la atmósfera, al agua y al suelo. Al igual que el Reglamento sobre el mercurio, aborda todo el ciclo de vida del mercurio.
El 14 de julio de 2023, la Comisión adoptó la propuesta de revisión del Reglamento sobre el mercurio. La legislación es fundamental para controlar la contaminación por mercurio. También aplica las obligaciones internacionales en la UE, en particular el Convenio de Minamata.
Acuerdo político provisional
La Comisión acoge ahora «con satisfacción» el acuerdo político provisional alcanzado entre el Parlamento Europeo y el Consejo sobre la propuesta de la Comisión de revisión del Reglamento sobre el mercurio. Dada la disponibilidad de alternativas, el Reglamento sobre el mercurio revisado prohibirá los últimos usos intencionados restantes del mercurio en la UE. Al prohibir el uso de amalgama dental a partir del 1 de enero de 2025 e introducir la prohibición de fabricar, importar y exportar determinadas lámparas que contienen mercurio, este Reglamento revisado protegerá aún más a los europeos contra el mercurio tóxico. Esto representa un gran paso adelante para salvaguardar la salud humana y generar beneficios medioambientales significativos, en consonancia con el objetivo de contaminación cero de la UE.
La nueva ley ayudará a la UE y a sus Estados miembros a cumplir sus compromisos en el marco del Pacto Verde Europeo, la Estrategia de Sostenibilidad para las Sustancias Químicas y el Plan de Acción «Contaminación Cero».
Los Estados miembros tendrán que pasar de la amalgama dental a materiales de relleno sin mercurio. También tendrán que dejar de producir y exportar lámparas que contienen mercurio, sustituyéndolas por alternativas sin mercurio, como los LED, que también son más eficientes desde el punto de vista energético. Estas medidas están en consonancia con las adoptadas en virtud de otra legislación de la UE, como el Reglamento sobre restricciones a las sustancias peligrosas (RUSP).
Según ha expresado el comisario responsable de Medio Ambiente, Océanos y Pesca, Virginijus Sinkevičius, «no hay razón para seguir utilizando mercurio en nuestra vida cotidiana cuando los riesgos para la salud están tan bien documentados. Ahora disponemos de alternativas eficaces para la odontología y las lámparas. Con la revisión del Reglamento sobre el mercurio, la UE está en vías de convertirse en la primera economía sin mercurio y de avanzar hacia un futuro sin sustancias tóxicas para los ciudadanos de la UE y nuestro medio ambiente».
Resultados específicos
- El uso y la exportación de amalgama dental estarán prohibidos a más tardar el 1 de enero de 2025.
- Se permitirá una excepción limitada y temporal hasta el 30 de junio de 2026 para el uso, la fabricación y la importación de amalgama dental a los Estados miembros que requieran más tiempo para adaptar su sistema nacional de asistencia sanitaria.
- El uso, la fabricación y la importación de amalgama dental seguirán permitiéndose para necesidades médicas específicas cuando un médico lo considere estrictamente necesario.
- La fabricación, importación y exportación de otras seis lámparas con mercurio estarán prohibidas a partir del 31 de diciembre de 2025 o del 30 de junio de 2026, dependiendo de la categoría de lámpara.
Ahora el Parlamento Europeo y el Consejo tendrán que adoptar formalmente el nuevo Reglamento antes de que pueda entrar en vigor.