Según los ecologistas, existen alternativas de emplazamientos para proyectos de solar y eólica con menores impactos sobre la biodiversidad

La organización ecologista Ekologistak Martxan ha presentado 27 alegaciones al “Plan Territorial Sectorial de las Energías Renovables en Euskadi” y a su correspondiente Estudio de Impacto Ambiental (EIA). El 27 de abril se hizo pública la orden de la consejera de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente, Arantxa Tapia, por la que se aprobaba inicialmente el PTS, abriéndose el período de información pública y alegaciones el 23 de mayo. Tras el plazo de 45 días, este Plan ha recibido más de 4.000 alegaciones por parte de organizaciones ecologistas, vecinales y agrarias e incluso ayuntamientos, como es el caso de Alonsotegi, Arrankudiaga o Tolosa, entre otros.

En el documento presentado, se plantean, entre otras, medidas como el aumento de la zona de protección de los hitos paisajísticos y espacios protegidos a 2 km, en lugar de los 100 m propuestos en el Plan, y que todas las áreas kársticas “sean catalogadas como de sensibilidad ambiental máxima respecto a la implantación de energías renovables”. Asimismo, proponen que “cualquier nuevo Espacio Natural Protegido, que se declare bajo cualquier figura de protección, pase automáticamente a ser considerado ‘Zona de Exclusión’ del PTS sin ninguna excepción”. Según los ecologistas, “parece que existen suficientes alternativas de emplazamientos para proyectos de solar y eólica donde se producirían menores impactos sobre la biodiversidad”.

En las alegaciones entregadas se insiste en que el PTS “se sigue basando en un modelo que hay que cambiar, basado en grandes proyectos de producción energética centralizados, en lugar de pequeños proyectos y con menos impacto, con la participación de las comunidades energéticas y la necesaria democratización de la producción con energías renovables para tener una transición energética justa”. La organización ecologista solicita que se tenga en cuenta “el decrecimiento necesario por la gran huella ecológica de Euskadi (si toda la humanidad viviera como en Euskadi necesitaríamos 2,65 planetas) y se prioricen los proyectos pequeños y distribuidos cercanos a los consumos”.

Análisis sobre el riesgo de colisión de aves y murciélagos

Tras las noticias que reflejan la alta mortalidad a consecuencia de los aerogeneradores, la organización ecologista considera primordial un análisis sobre el riesgo de colisión de aves y murciélagos con los aerogeneradores que superan los 2MW, y en caso necesario que se prohíba instalación de dichos generadores, “teniendo en cuenta las áreas prioritarias de reproducción, alimentación, dispersión y concentración de la avifauna de la CAV”.

Las alegaciones presentadas por Ekologistak Martxan en los tres territorios históricos incluyen, además, alegaciones sobre zonas concretas como el cordal Alen-Mello, el Parque Natural de Gorbeia, la sierra de Ordunte, las sierras de Elgea y Urkilla, el Geoparque de la Costa Vasca, el macizo Pagasarri-Ganekogorta o el cordal de Canto Blanco.

Como conclusión a sus alegaciones, solicitan que “se tengan en cuenta todas las alegaciones presentadas y, por lo tanto, se propone la devolución del PTS al Departamento actuante, para su reelaboración, y que se elabore, a la mayor brevedad posible, una nueva propuesta del mismo, más legible, precisa (mejor documentada), motivada y accesible”.

Asimismo, Ekologistak Martxan ha pedido que también la apertura de un nuevo proceso de exposición y participación pública sea “más transparente y participativo, para lograr un consenso social para la necesaria implantación de energías renovables en Euskadi y el mantenimiento adecuado de la biodiversidad”.

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