“Si el 5G solo es una evolución del 4G, vamos a fallar”

Cuando en España apenas ha empezado a tener un impacto real el uso de la tecnología 4G, en Europa ya se está discutiendo sobre el 5G y cómo se va a afrontar el incremento exponencial en el uso de datos. Aunque las dudas sobre su inversión y avances salen a la luz.

“Si el 5G solo es una evolución sobre el 4G, vamos a fallar”. Así de rotundo se ha mostrado el CTO del operador holandés KPN, Erik Hoving, en el marco del LTE World Summit que se celebra durante esta semana en Amsterdam. El encuentro, que reúne a las principales operadoras y empresas tecnológicas relacionadas con el sector de las telecomunicaciones, ha pivotado en gran medida sobre el 5G y el futuro despliegue de redes.

“El 5G va a exigir cosas diferentes de los operadores”. Hoving tiene claro que todo lo que está por venir, incluyendo el internet de las cosas, necesitará de mayor capacidad y latencia. El CTO de KPN ha explicado que, por ejemplo, si quieren salir al mercado los coches conectados no podrá haber ningún tipo de problema con la conexión. Y asegura que eso no pasa en estos momentos.

Otra de las críticas que ha puesto sobre la mesa Hoving tiene que ver con la apuesta que ha habido por la cantidad en vez de la calidad en el despliegue de redes. Sin pelos en la lengua, ha señalado que la obsesión por parte de los operadores ha sido mirar más sus cuadros financieros que la tecnología, y por eso se ha querido correr tanto. Inversión, inversión y más inversión. Hoving señala que la inversión en infraestructura y espectro será algo irrenunciable. Señala que de momento el WiFi está siendo el gran aliado para aliviar el consumo de datos móviles, pero cree que en un futuro habrá que mejorar las redes porque los usuarios demandarán más y mayor calidad.

A contracorriente de como sucede en este tipo de eventos, las autocríticas han sido la posición dominante. Así, el vicepresidente de arquitectura de red de Orange, Alain Maloberti, ha advertido que las compañías no pueden esperar tanto a utilizar el 5G como ha pasado con el 4G.

Por su parte, el director de Asuntos Internacionales de AT&T, Antonio Amendola, sacó a relucir otro de los sempiternos debates en el sector de las telecomunicaciones: la regulación. Insistió en la idea de que el 5G supondrá mayor inversión, y que eso será complicado si tienen que competir a la vez con “otros actores” que ofrecen servicios similares. Esta alusión, como hacen todas las grandes compañías del sector, va dedicada a los OTTs, empresas como Facebook o Google que basan sus negocios utilizando la red instalada.

5G en Europa

Ante este escenario, donde el debate se centra en la llegada del 5G, cabe preguntarse qué está pasando en España. Es decir, en algunos países de Europa comienza a ser una realidad (más o menos), mientras que en territorio español seguimos a vueltas con el recién estrenado 4G.

Poniendo el foco en los principales mercados europeos, la situación está de la siguiente manera:

Por lo que respecta a España, es un tema que los operadores no obvian. Por ejemplo Telefónica ya trabaja en ello, aunque en cierto modo el 4G todavía no está realmente implantado en España. Es decir, Orange, Vodafone o Movistar apenas llegan a los 3 millones de clientes con 4G cada una, de un total de más de 50 millones de líneas móviles, parece que falta mucho recorrido.

Precisamente recorrido es lo que ha tenido la llegada del 4G. Desde la subasta en la banda de 800MHz (y otras de menor calidad), donde realmente esta tecnología toma sentido, han pasado 4 años de auténticos despropósitos que reflejan cómo será el 5G.

Para hacerse una idea.

El viacrucis del 4G en España

2011. Una subasta para largo. Los operadores, felices, se hacían con su trozo de pastel en la banda de 800 MHz (más otras bandas con menor calidad) con el fin de poder ofrecer un servicio mejor a sus clientes y revolucionar así la tecnología móvil.

2012. Preguntas y respuestas sobre el dividendo digital. Resulta curioso leer cuestiones sobre el tema de hace tanto tiempo, sobre todo porque podría haber servido hace unos meses para hacer un copy/paste y volverlo a publicar. Con las frecuencias compradas desde 2011, se sabía que la banda de 800 MHz debía quedar libre. Los antenistas hacían sus cálculos, las empresas de televisión también, costes, gastos… Todo estaba previsto.

2013. Habrá 4G (800 MHz) en 2014. Durante el MWC de Barcelona en ese año, el ministro José Manuel Soria aseguró el compromiso del Gobierno para adelantar en un año la liberalización del dividendo digital.

2013. De “alta probabilidad” a dudas. En solo unos pocos días se pasó de algo altamente probable a encontrar nuevas vías para desplegar el 4G, pero no la banda de 800 MHz. A mediados de 2013 era prácticamente una realidad que no llegaría la liberalización dividendo digital en 2014, pero desde Industria lo negaban.

2014 (Mayo) Algo falla. Antes de que pasase nada ya avisaban los instaladores de antenas sobre los problemas que podrían surgir con respecto a la reantenización, las interferencias, y toda clase de contingencias que podrían surgir.

2014 (Septiembre) Ante el sector se daba luz verde. En el ‘28 Encuentro de Telecomunicaciones’ en Santander el ministro Soria confirmaba que sin ningún género de dudas habría 4G en la banda “correcta” el 1 de enero de 2015.

2014 (Diciembre) Otra prórroga ¿esperada? Aquí se ofrecía otra fecha: no sería hasta el mes de abril cuando finalmente estaría disponible la banda de 800 MHz.