Para un político de la oposición de un país es muy duro tener que enfrentarse a un gobierno, a un presidente o a una presidenta que está cumpliendo y que su gestión genera beneficios para la ciudadanía. Ese es el escenario que vive cada día Leonel Fernández ante los éxitos del actual Jefe del Estado de la República Dominicana, Luis Abinader.
Desde agosto de 2020, los hechos son incontestables e incuestionables y eso es una losa para quien sólo tiene una obsesión en la vida: el poder. Por esa razón, Leonel Fernández, un hombre del que no se puede cuestionar su olfato político, se dio cuenta de que por los cauces de la oposición democrática no tenía nada que hacer. Por esa razón, eligió la senda del populismo, de la manipulación de los hechos y de la transmisión de una realidad paralela que sólo existe en la creación de contenidos para las redes sociales.
En los últimos dos meses, República Dominicana, gracias a la gestión del presidente Luis Abinader, ha protagonizado éxitos diplomáticos históricos y ha recibido el aval de los organismos internacionales de las políticas económicas implementadas por el actual gobierno dominicano.
Ante esa situación y a menos de un año para las elecciones presidenciales, Leonel Fernández necesitaba que el pueblo mirara hacia otro lado y el populismo es tan flexible que da herramientas para crear cortinas de humo basadas en las anécdotas o, directamente, en la mentira y el olvido del pasado.
En un evento organizado por su propia fundación, la misma que cobraba cheques de los contratistas del Estado cuando Leonel era presidente, no tuvo otra ocurrencia que hablar de narcotráfico. «Aquí llegaba la droga, salía hacia Puerto Rico, Estados Unidos y países de Europa. Con el tiempo nos hemos convertido en un país receptor, por lo tanto, se ha entrado a un mercado de consumo que ha generado adicción en distintos sectores de la vida nacional».
Nuevamente, los datos son los que certifican la máquina de noticias falsas en la que se ha convertido Leonel Fernández. Desde que Luis Abinader es presidente, las aprensiones de cargamentos de diferentes drogas se han multiplicado respecto a la época de gobiernos del PLD. Las Fuerzas de Seguridad de República Dominicana han logrado mantener sistemas de detección de cargamentos con la colaboración de agencias internacionales de lucha contra el narcotráfico. ¿Por qué Leonel habla ahora de este tema?
Si se analiza bien esa declaración se puede comprobar que al expresidente no se le ha ido la cabeza ni ha tenido un lapsus. Todas y cada una de las palabras están perfectamente estudiadas. Es una declaración corta, de menos de 300 caracteres, es decir, perfecta para transmitir en las redes sociales y, a través de cadenas de bots perfectamente estructuradas, llegar a decenas de miles de personas en apenas unos segundos. El mismo sistema que han utilizado Donald Trump y las formaciones de extrema derecha europeas instruidas por el ultra Steve Bannon en una escuela situada en un monasterio italiano.
Por otro lado, el mensaje que se pretende transmitir es que durante los gobiernos de Leonel no había droga porque República Dominicana era un país de paso. Eso es falso. En todos los países del mundo, incluso en Corea del Norte, hay drogas y eso ocurre porque es el negocio ilegal más rentable. Por tanto, Leonel miente. Durante sus gobiernos había drogas en RD, se trapicheaba y se traficaba con drogas de igual manera que sucede ahora. La única diferencia es que ahora se persigue la corrupción y, durante los gobiernos de Leonel, se incentivaba.
Cuando se tiene obsesión por el poder, no es de extrañar que, tanto el expresidente Fernández como sus aliados políticos, estén utilizando los mecanismos de propaganda de una de las manos derechas de Adolf Hitler: Joseph Goebbels.
En concreto, Leonel está aplicando con insistencia el principio de la transposición, es decir, que si no se pueden negar las malas noticias, hay que inventar otras para generar distracción, y el principio de la exageración, basado en convertir cualquier anécdota, por pequeña que sea, en una amenaza grave.
Populismo, trumpismo y estrategias de la extrema derecha. ¿Esto es lo que se presenta ante el pueblo dominicano como alternativa al presidente Abinader? El humo se disuelve, mientras que los hechos perduran, sobre todo cuando se conforman sobre una tendencia positiva que parece imparable. Leonel es el candidato fracasado. El problema es que él no lo sabe.
