Son muchos los que piensan que la grasa localizada en ciertas partes del cuerpo y el volumen que esta ocasiona resultan muy difíciles de eliminar a menos que haya un procedimiento quirúrgico de por medio.

Afortunadamente esto no es así, pues hay una manera muy eficaz de lograrlo sin tener que recurrir a ninguna cirugía: el CoolSculpting.

¿Qué es exactamente el CoolSculpting?

El CoolSculpting es un procedimiento mediante el que se tratan con delicadeza y efectividad las células grasas que hay bajo la piel sin que la misma se vea afectada en lo más mínimo.

Cuando estas células son tratadas se cristalizan y terminan muriendo, lográndose de este modo que pasado un tiempo la grasa sea procesada de manera natural por el cuerpo eliminando esas células muertas.

Esto se lleva a cabo usando el efecto controlado del frío (criolipólisis), aplicándolo de manera controlada en la parte en la que se encuentra la grasa.

¿Cuándo empiezan a notarse los resultados?

Lo que se obtiene es una figura más estilizada que empieza a apreciarse en un tiempo de entre uno y tres meses. Los resultados son a largo plazo, pues las células adiposas que han sido tratadas desaparecen para siempre.

Y es que todo se elimina de manera natural, por lo que la grasa no volverá a acumularse allí y el organismo no volverá a reproducirla (a no ser que se trate de un caso de obesidad extrema).

Además, el CoolSculpting ofrece planes de tratamientos individuales que permiten que pueda adaptarse específicamente a cada cuerpo. Este tratamiento está orientado a las mujeres de entre 25 y 45 años.

Un procedimiento de probada seguridad y eficacia

Lo cierto es que no es extraño que con estos resultados el CoolSculpting se haya convertido en algo a lo que cada vez recurre más gente para conseguir mejorar su imagen.

De hecho, se ha convertido en el procedimiento número uno en el mundo dentro de la reducción no invasiva de la grasa localizada. Los tratamientos aplicados en todo el mundo cuentan ya por millones.

Y no solo su eficacia está más que demostrada, también su seguridad, pues está autorizado por la Administración de Medicamentos y Alimentos (FDA) y avalado por más de 50 estudios clínicos.

No son necesarias las agujas ni hace falta reposo

Otra de las grandes ventajas de este procedimiento es que elimina la grasa localizada sin que las agujas tengan que intervenir y sin causar ningún tipo de problema en la piel.

Ni siquiera será necesario reposo (nada de bajas médicas) ni la más mínima cirugía. Tampoco intervendrán medicamentos ni anestesias.

¿Dónde y en qué partes puede ser aplicado este tratamiento?

Para obtener los beneficios del CoolSculpting evidentemente hay que acudir a un centro que lo aplique. En Sevilla, por ejemplo, este tratamiento es exclusivo del Centro de Medicina Estética de Carmen Sarmiento.

En cuanto a las zonas del cuerpo que pueden verse beneficiadas, estas son muchas. Por ejemplo, los glúteos, el abdomen, los muslos, las rodillas, la papada o los flancos, entre otras.

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