El deporte es como la vida misma, una obra de teatro en la cual no se permite ensayos, y donde hay que vivir intensamente cada momento antes de que el telón baje.
A pesar de que el deporte no tiene memoria, tras bajarse el telón y apagarse la música siempre nos quedarán los recuerdos, en forma de emociones, que el tiempo será incapaz de borrar.
Por eso, a partir de ahora a los deportistas solo les quedarán las emociones y los momentos vividos, y estos son tan profundos y personales que nadie podrá desterrarlos “Esto es para ser feliz y disfrutarlo”. Sintiéndote un auténtico privilegiado.
De ahí, que realizáramos una investigación transversal, a nivel cuantitativo, sobre la relación que existe en el alumnado federado, con una participación de 77 estudiantes nacidos entre los años 2010 y 2011, que están cursando el tercer ciclo de primaria, y su grado de felicidad.
Se les pidió calificar, entre 0 y 10 puntos su estado de felicidad al realizar deporte. Todas las puntuaciones estuvieron por encima de los siete puntos, y la respuesta más frecuente fue de diez puntos, la máxima calificación.
Esto se puede explicar debido a la relación entre la actividad física y la salud mental. La felicidad es una manifestación de la salud mental positiva que muestra satisfacción con la vida, optimismo y autoestima. Cuando se practica un deporte disminuyen los estados negativos como ansiedad, depresión y angustia psicológica. Por esta razón es normal que los estudiantes de que practican un deporte lleguen a presentar un estado de felicidad alto.
Continuamos el trabajo realizando una comparativa entre la percepción de felicidad y los resultados académicos según el deporte federado en que se compitiera. La mayor nota media la obtuvieron quienes practicaban balonmano, seguido de estudiantes de pádel y natación, mientras que la media de felicidad estuvo más alta en estudiantes de pádel, fútbol y gimnasia rítmica.
En general el nivel de felicidad y la media académica obtuvieron puntajes altos en todos los deportes federados, por lo tanto, puede existir una relación significativa entre la felicidad y el rendimiento académico
La investigación concluyó analizando cómo cualquier disciplina deportiva influye en la conducta, cómo pueden influir los entrenamientos y las actividades extraescolares en su día a día, ordenando su vida o descontrolándola, influyendo de manera negativa o positiva en sus estudios, y con qué grado de satisfacción y felicidad les repercute en su vida el poder realizar dicha disciplina deportiva.
En definitiva, cualquier deportista tiene que pensar que la felicidad y la intensidad no son estados de ánimo, sino formas de entender la vida y el entrenamiento.