Ecologistas en Acción denuncia que este verano «se está produciendo una proliferación sin precedentes de acampadas ilegales en espacios naturales costeros de la Ría de Arousa». Y es que algunos de los lugares más aislados de esta costa, como el bosque pantanoso de Porrón, en Rianxo, se han convertido en las últimas semanas en zonas incontroladas para autocaravanas y furgonetas, «donde usuarios incívicos han estado talando árboles y vegetación de ribera para colocar sus instalaciones ilegales y dejando un rastro de basura y heces. No se trata de viajeros de paso ni de jóvenes que acampan durante el fin de semana, sino de turistas totalmente equipados para una estancia prolongada que son irrespetuosos con el medio ambiente», subraya el portavoz de la organización ecologista.
Recuerdan desde Ecologistas en Acción que la acampada y el estacionamiento prolongado de autocaravanas «es totalmente ilegal en zonas del Dominio Público Marítimo-Terrestre, lo que ya ha motivado una primera denuncia ante la Demarcación de Costas del Estado en Galicia». Sin embargo, lamentan la falta de control, la ausencia de sanciones e incluso la negativa de las Administraciones a tomar medidas para proteger estas zonas costeras, como la instalación de señales u obstáculos que impidan el acceso de vehículos.
Entre las prácticas incívicas documentadas se encuentran la tala de árboles, la instalación de toldos y lonas, la realización de hogueras y el uso de estufas de gas (con riesgo de incendio), además de convertir espacios relictos en letrinas y vertederos de desechos, provocando una degradación de hábitats prioritarios, incluso en zonas ubicadas en la Red Natura 2000. Por ello, anuncian que comenzarán a presentar denuncias individuales contra los infractores al considerar que la magnitud de los daños puede implicar la comisión de delitos contra el medio ambiente y la naturaleza.
Porrón (Rianxo), zona cero de las macrocampings ilegales
El pasado fin de semana, primero de agosto, Ecologistas en Acción vio cómo «una decena de vehículos convertían un bosque pantanoso junto a la playa de Porrón (Rianxo) en un auténtico macrocamping con toldos, mobiliario y más de 12 puntos llenos de excrementos. Este caso también llama la atención porque se trata de un espacio situado a escasos metros de un aparcamiento temporal habilitado por el consistorio y a menos de 1 km de un camping que incluye servicios para autocaravanas».
Para la organización, estas prácticas de turismo incívico no sólo causan grandes daños a estos espacios naturales, sino que tampoco aportan nada a las economías locales, generando un problema de imagen para este tipo de destinos y de salud para el resto de usuarios y el barrio. Por ello, requieren del compromiso de todas las Administraciones para tomar medidas urgentes encaminadas a acabar con este tipo de ilegalidades.