
El Procurador del Común ha admitido a trámite la queja por la novillada, celebrada en León el pasado 24 de febrero, que fue presentada como una clase práctica de lidia dirigida a niños y adolescentes.
Este espectáculo taurino (novillada sin picadores) no fué reconocido como tal por las autoridades competentes del Ayuntamiento y la Junta de Castilla León, encargadas de su autorización y supervisión. Por tanto, en palabras de Ecologistas en Acción, «cabe suponer que se realizó de manera clandestina, sin las preceptivas medidas sanitarias y de seguridad. Es decir, con riesgos añadidos para las personas menores de edad que participaron como toreros y como público».
La entrada fue gratuita, por lo que la organización ha solicitado a la Comisión de Transparencia, información de la subvención recibida de la Consejería de Cultura promotora del evento: «una actividad itinerante de las escuelas de tauromaquia, regadas con dinero público por el Consejero, Gonzalo Santonja Gómez, que ha hecho de su afición a las corridas de toros una prioridad cultural en Castilla y León».
Por ello, también ha pedido el presupuesto que, el pasado año, destinó la Consejería de Cultura a la tauromaquia (espectáculos, escuelas, publicidad, etc.)
Ecologistas en Accion de León está colaborando en la Iniciativa Legislativa Popular #NoEsMiCultura para la abolición de la Ley 18/2013, que regula la tauromaquia como Patrimonio Cultural, reconocimiento institucional que facilita su financiación pública y su promoción, incluso entre los niños.
Al respecto, apunta la organización que «no nos cansaremos de recordar la recomendación que el Comité para los Derechos del Niño de Naciones Unidas hizo al Gobierno de España en 2018, instándole a prohibir la participación de las personas menores de edad en los espectáculos taurinos».