BBVA ganó 1.141 millones de euros en el tercer trimestre de 2020. Esta cifra es el mejor resultado trimestral del año y supera con creces al registrado en el segundo trimestre (+79,5% a tipos de cambio corrientes, +83,4% en constantes). Frente al mismo periodo de un año antes, es un 6,8% menor (+4,1% en euros constantes). La solidez de los ingresos recurrentes y la contención de costes impulsaron el margen neto un 13,5% interanual a tipos de cambio constantes. Además, en un entorno todavía complejo por la pandemia, BBVA ha demostrado una fuerte capacidad de generación de capital y los indicadores de riesgo han evolucionado de manera favorable. Los resultados trimestrales han batido las expectativas del mercado en un 48%, al esperar el consenso de analistas un resultado de 773 millones de euros.

“El beneficio del tercer trimestre crece con fuerza frente a los trimestres anteriores. Esta buena evolución es resultado de la fortaleza de nuestros ingresos recurrentes, el excelente control de gastos y los menores saneamientos, gracias al significativo esfuerzo de anticipación de provisiones de la primera parte del año”, ha señalado Onur Genç, consejero delegado de BBVA.

Los resultados del banco han ido de menos a más en 2020, principalmente por los menores saneamientos y provisiones. Además, en los últimos tres meses se ha visto una recuperación de la actividad minorista en todas las geografías, que se ha reflejado en la cuenta de resultados del tercer trimestre.

Las variaciones comentadas en adelante son a tipos de cambio constantes, para hacer una mejor comparativa de la evolución de cada línea.

En la parte alta de la cuenta, el margen de intereses avanzó un 5,5% interanual en el tercer trimestre (+4,9% frente al trimestre anterior), hasta 4.109 millones de euros. En los nueve primeros meses del año, esta línea de la cuenta alcanzó 12.763 millones de euros, un 4,7% más que en el mismo periodo de 2019. Las comisiones netas registraron un descenso interanual del 0,8% en el tercer trimestre (+12,9% frente a los tres meses previos), hasta 1.143 millones de euros. Entre enero y septiembre, esta partida de ingresos fue de 3.444 millones de euros (-1,3% interanual).

Destaca la buena evolución interanual del resultado de operaciones financieras (ROF). En el trimestre alcanzó 372 millones (+13,3% interanual).

El margen bruto ascendió a 5.663 millones de euros en el tercer trimestre, lo que supone un avance interanual del 5% (+6,2% frente al segundo trimestre). Entre enero y septiembre, el margen bruto registró un alza del 7,4%, hasta 17.708 millones de euros.

Durante el tercer trimestre el banco siguió conteniendo los gastos de explotación, que descendieron un 3,8% interanual, hasta 2.570 millones de euros. Entre enero y septiembre, los gastos fueron de 8.082 millones de euros, un 2,4% menos, lo cual es especialmente destacable teniendo en cuenta que la inflación media de los últimos 12 meses en los países en los que está presente el Grupo fue positiva en un 4,4%. La contención de los gastos de explotación y la positiva evolución de los ingresos más recurrentes en el trimestre han permitido mantener las mandíbulas operativas en positivo. El ratio de eficiencia se situó a cierre de septiembre en el 45,6% (frente al 63,6% de la media de entidades europeas comparables), lo que supone un descenso de 438 puntos básicos con respecto a 2019.

Destaca la resistencia del margen neto, que continuó creciendo a doble dígito, con un avance interanual en el trimestre del 13,5%, hasta 3.093 millones. Entre enero y septiembre esta cifra se elevó a 9.626 millones de euros, con un crecimiento del 17,3% con respecto al mismo periodo del año anterior.

BBVA ganó 1.141 millones de euros entre julio y septiembre (+4,1% respecto al tercer trimestre de 2019). Este resultado es un 83,4% superior al registrado en el segundo trimestre de 2020. En los nueve primeros meses del año, el beneficio atribuido alcanzó 2.069 millones de euros (-36,6% interanual), excluyendo el deterioro del fondo de comercio de EE. UU. registrado en el primer trimestre (-2.084 millones de euros). Incluyendo este impacto, el resultado atribuido fue de -15 millones de euros.

Tras la anticipación de provisiones realizada en el primer trimestre, con un coste del riesgo del 2,57%, esta métrica siguió mejorando: pasó del 1,51% en el segundo trimestre al 0,97% en el tercero, en línea con las expectativas. El coste del riesgo acumulado desde enero mejoró desde el 2,04% del primer semestre al 1,69% a cierre de septiembre. Los ratios de mora y cobertura mostraron estabilidad en el trimestre, y se situaron en el 3,8% y el 85%, respectivamente.

El ratio de capital CET 1 ‘phased-in’ alcanzó el 11,99% a 30 de septiembre, mientras que el CET 1 ‘fully loaded’ se situó en el 11,52%, lo que supone una generación de 30 puntos básicos con respecto a la cifra de junio (11,22%). El Grupo BBVA se ha marcado como objetivo mantener un colchón sobre su requerimiento mínimo de ratio CET1 ‘fully-loaded’ (actualmente en el 8,59%) de entre 225 y 275 puntos básicos. El nivel actual se encuentra por encima de este objetivo (293 puntos básicos), un hito alcanzado antes de lo esperado por el banco.

El Grupo BBVA mantiene una sólida posición de liquidez, con un ratio LCR o ‘Liquidity Coverage Ratio’ del 159% y un ratio NSFR o ‘Net Stable Funding Ratio’ del 127%, ambos por encima del requerimiento regulatorio (100%).

En un entorno complejo, el valor tangible por acción se mantuvo prácticamente estable y cerró el trimestre en 5,84 euros por acción.

En cuanto a balance y actividad, la cifra bruta de préstamos y anticipos a la clientela se situó en septiembre en 379.018 millones de euros, un 4,2% por encima del cierre del año anterior. En la comparativa con respecto a diciembre de 2019, la cartera de empresas aún sigue mostrando un ligero crecimiento, aunque significativamente por debajo del registrado en el primer semestre, donde las compañías hicieron acopio masivo de liquidez a través de los diferentes programas de apoyo impulsados por los gobiernos en las distintas áreas geográficas. Los recursos de clientes aumentaron un 8,7% entre enero y septiembre, hasta 495.171 millones de euros, impulsados por los depósitos a la vista.

Crecen los clientes digitales

La crisis sanitaria provocada por la COVID-19 está siendo un acelerador de la digitalización. Solo entre enero y septiembre el banco ha sumado cuatro millones de clientes móviles (+14%) hasta llegar a 32,8 millones (un 57% del total). Mientras, los clientes digitales crecieron un 12% con respecto a diciembre, hasta alcanzar la cifra de 35,6 millones (un 62% del total). Las interacciones a través de las aplicaciones móviles de BBVA se han multiplicado por cinco con respecto a un año antes. El posicionamiento de BBVA en banca móvil es diferencial. Por ejemplo, la aplicación móvil de BBVA es la más usada en España, con un 22,2% de los usuarios de aplicaciones bancarias, según Smartme Analytics. En México, el banco lidera la cuota de negocio en comercio electrónico, con un 39%, gracias a las capacidades digitales y soluciones de pagos diferenciales.

Áreas de negocio

A continuación se detallan las claves de la actividad y la cuenta de resultados de las áreas de negocio.

En España, gracias a los segmentos de empresas y pymes, impulsados por los préstamos con avales públicos, la inversión crediticia creció un 0,8% interanual. Los recursos de clientes aumentaron un 4,6% en tasa interanual, debido al crecimiento de los depósitos a la vista (+11,7%). En la cuenta de resultados, el margen bruto de los nueve primeros meses del año creció un 3,2% interanual, gracias al impulso de las comisiones y el resultado de operaciones financieras (ROF). El margen neto registró un avance interanual del 16,6% en los nueve primeros meses del año gracias, asimismo, a la fuerte contención de costes: los gastos de explotación decrecieron un 6,7% en el periodo, la caída más pronunciada de los últimos cinco años. El resultado atribuido alcanzó 440 millones de euros entre enero y septiembre, un 58,7% menos que en el mismo periodo del año anterior, por los saneamientos y provisiones en la primera parte del año. No obstante, las menores provisiones impulsaron el resultado atribuido un 6,5% en el trimestre, en tasa interanual, y un 54,2% con respecto al segundo trimestre de 2020, hasta alcanzar la cifra de 352 millones de euros. En cuanto a los indicadores de riesgo, la tasa de mora se situó en el 4,32% y la de cobertura, en el 67,6%. Tras el fuerte repunte experimentado en el primer trimestre, el coste de riesgo acumulado ha ido mejorando hasta situarse en el 0,80% a septiembre.

En Estados Unidos, también fueron los segmentos de empresas y pymes, impulsados por los programas de apoyo del gobierno, los que ayudaron a la inversión crediticia, que creció un 6,3% interanual. Los recursos de clientes aumentaron un 17% respecto a un año antes, impulsados por los depósitos a la vista. En la cuenta de resultados, destaca el crecimiento de los ingresos recurrentes (margen de intereses y comisiones) y la reducción de costes respecto al mismo trimestre del año anterior. Entre enero y septiembre, el margen bruto descendió un 2,4%. Los gastos de explotación registraron un descenso del 2,5%, generando un margen neto de 960 millones de euros (-2,4%). El área ganó 115 millones de euros en los nueve primeros meses del año, lo que supone un descenso del 75,8% interanual, provocado principalmente por el deterioro de activos financieros registrados en el primer trimestre del año. En lo referente a los indicadores de riesgo, la tasa de mora se situó en el 1,93%, la de cobertura, en el 94,5% y el coste del riesgo mantuvo la tendencia a la baja hasta el 1,69%.

En México, los segmentos de empresas, hipotecas y sector público ayudaron a que la inversión crediticia creciera un 5,7% en tasa interanual. Los recursos de clientes mostraron un incremento del 14,3% frente a doce meses antes, favorecidos por el crecimiento tanto de los depósitos a la vista como, en menor medida, de los fondos de inversión. La cuenta de resultados mejoró significativamente en el tercer trimestre con respecto al segundo gracias al crecimiento de los ingresos recurrentes, a la contención de los gastos de explotación y a menores provisiones. Entre enero y septiembre, el margen bruto creció un 0,4%, hasta 5.231 millones de euros. El margen neto alcanzó 3.489 millones de euros, un 0,1% más. El resultado atribuido entre enero y septiembre fue de 1.204 millones de euros, lo que supone un descenso del 30,5%, debido al impacto de las provisiones crediticias registrado principalmente en el primer semestre. El resultado fue de 567 millones de euros, lo que supone un avance del 88,1% con respecto al segundo trimestre de este año. El coste del riesgo mantuvo la tendencia a la baja, hasta situarse en el 4,27% en el acumulado del año. Los ratios de mora y cobertura se mantuvieron estables en el 2,29% y el 170,2%, respectivamente.

En Turquía, la inversión crediticia se incrementó un 34,3% interanual, gracias principalmente al crecimiento de los préstamos en lira turca, favorecidos por los créditos a empresas y al consumo. Los depósitos de la clientela continuaron siendo la principal fuente de financiación del balance de Turquía. Los recursos totales de clientes crecieron un 36,3% interanual. Los resultados de Turquía muestran la fortaleza de su margen neto que crece un 49,6%, en los nueve primeros meses del año, gracias a la evolución del margen de intereses, apoyado en las buenas dinámicas de actividad y una buena gestión de los diferenciales. El resultado atribuido en los nueve primeros meses del año ascendió a 503 millones de euros, un 58,6% más que en el mismo periodo de 2019. En el tercer trimestre, el beneficio atribuido fue de 252 millones de euros, un 84,8% por encima del trimestre anterior. El coste del riesgo mantuvo la tendencia a la baja, hasta alcanzar el 2% en el acumulado del año. La tasa de mora se situó en el 7,11% y la de cobertura, en el 81,9%.

En América del Sur, el dinamismo de la actividad crediticia se tradujo en un incremento del 13,1% en términos interanuales a 30 de septiembre. Destaca la evolución de la cartera mayorista, por mayores disposiciones de líneas de crédito de las empresas ante la situación generada por la crisis sanitaria. Los recursos de la clientela aumentaron un 19,4% en tasa interanual, debido fundamentalmente a la evolución de los depósitos a la vista. América del Sur generó un resultado atribuido acumulado de 326 millones de euros entre enero y septiembre del año 2020, lo que representa un descenso interanual del 30,1%, derivado principalmente del incremento en los saneamientos en la primera mitad del año. En el tercer trimestre, y gracias a la anticipación de provisiones en la primera parte del año, el resultado atribuido fue de 182 millones de euros, un 111,8% más que en el segundo trimestre del año. El coste de riesgo acumulado en el año se situó en el 2,49%, la tasa de mora, en el 4,3% y la de cobertura, en el 110%.

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