La IV Conferencia Ministerial Mundial de Alto Nivel sobre la Resistencia a los Antimicrobianos (RAM) ha concluido con la adopción de los Compromisos de Jeddah, que establecen medidas prácticas, viables e intersectoriales para abordar este complejo problema sanitario.
Inmediatamente después de la adopción de los compromisos en la ciudad costera saudí, el Ministro de Sanidad del país anfitrión, Fahad Al-Jalajel, ha declarado que el resultado de la conferencia proporciona «elementos fundamentales » para que los Estados miembros y los organismos internacionales actúen de forma significativa contra la resistencia a los antibióticos y otros medicamentos, y que se basa en la Declaración Política sobre la RAM adoptada en una reunión de alto nivel de la Asamblea General de la ONU celebrada hace unas semanas en Nueva York.
Los compromisos destacan el papel de la Secretaría Conjunta Cuatripartita sobre la RAM, integrada por la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE). También piden la creación de un nuevo «puente biotecnológico» destinado a impulsar la investigación, el desarrollo y la innovación para encontrar soluciones a esta amenaza mundial.
La resistencia a los antimicrobianos (RAM) se produce cuando los gérmenes desarrollan la capacidad de vencer a los medicamentos diseñados para matarlos. Puede propagarse entre personas, animales y el medio ambiente, y causar infecciones mortales.
La OMS ha declarado que la resistencia a los antimicrobianos es una de las 10 principales amenazas de salud pública a las que se enfrenta la humanidad.
El Ministro Al-Jalajel ha anunciado la creación en Arabia Saudí de un Centro de Aprendizaje sobre la RAM «Una sola salud» y un Centro regional de Logística y Acceso a los Antimicrobianos para fomentar la colaboración mundial y mejorar el acceso a los antimicrobianos y diagnósticos esenciales.
No dejar a nadie atrás
Jacqueline Álvarez, jefa de la Subdivisión de Productos Químicos y Salud del PNUMA, ha acogido con satisfacción la adopción de los Compromisos de Jeddah y ha afirmado que el documento final es un ejemplo de multilateralismo fructífero y de «los beneficios de trabajar conjuntamente entre los distintos sectores». Y ha añadido que «Los compromisos de Jeddah reúnen a todos los que tienen un papel que desempeñar».
Álvarez ha dicho que el documento reconoce que los países tienen diferentes capacidades para hacer frente a la resistencia a los antimicrobianos, y se refiere específicamente a los países en desarrollo y cómo pueden participar. «No podemos dejar a nadie atrás, lo que significa que debemos asegurarnos de que todos puedan crecer juntos y no aumentar la brecha entre los países»,ha explicado.
La responsable del PNUMA ha subrayado la necesidad de aumentar la financiación, «no sólo de la forma tradicional, sino también creando oportunidades para desarrollar más investigación y crear soluciones ecológicas y sostenibles, que permitan a todos sentir que tienen oportunidades al tiempo que se protegen».
Tanto la conferencia de Jeddah como la anterior reunión de la Asamblea General de Alto Nivel se centraron en las dimensiones sociales y económicas del problema de la RAM, «que aún no se han debatido a fondo», ha dicho.
Las partes interesadas estaban ansiosas por aprovechar el impulso político mundial y unirse en la lucha contra la RAM. Justo al término de la conferencia, se reunieron paralelamente en el Ritz-Carlton de Jeddah para celebrar la segunda asamblea plenaria de la Plataforma de Asociación Multilateral con el fin de trazar el camino a seguir y convertir los nuevos compromisos en una realidad práctica.
La plataforma es una de las tres estructuras de gobernanza establecidas por la Secretaría Conjunta Cuatripartita sobre la RAM y albergada por la FAO. Reúne a 250 miembros «desde la base hasta el nivel mundial».
La coordinadora de la Plataforma de Asociación de Múltiples Partes Interesadas,Nelea Motriuc, ha explicado que la resistencia a los antimicrobianos se consideraba anteriormente como una cuestión técnica que debía debatirse entre médicos y veterinarios, pero «todo cambió» con la primera Reunión de Alto Nivel de la Asamblea General sobre la amenaza mundial en 2016.
«Una reunión de alto nivel en la Asamblea General realmente puede ayudar a crear impulso y poner de relieve una cuestión de desarrollo», ha añadido.
Motriuc ha dicho que la Plataforma es un mecanismo único «multisectorial, multidisciplinar, multinivel y multidimensional» que «no solo habla [de], sino que hace “el trabajo en todo el espectro de Una Salud, con el objetivo de “romper silos, tender puentes y crear un ecosistema de todos los actores, dimensiones y procesos que trabajan juntos.»